De un tiempo a esta parte noto que mi
visión no es todo lo precisa que desearía: lo cercano y lo pequeño cada
vez están más distantes. Paradojas of life tronko !!!
No debo hacer muchas cábalas para encontrar una explicación más que convincente..., aplastante: me acerco a los 50 años (a.D.g.).
El tiempo pasa inexorablemente y sus efectos lo quiera o no, dejan huella en este cuerpo serrano (no tengo aGüela, es cierto).
Como carroza de pró, intento justificar mi no juventud con frases tan manidas y recurrentes al estilo de... "pues yo estoy como cuando tenía y tantos años", "estoy echo un chaval, veo a otros de mi tiempo que están peor que yo". Je, Je y Je.
Luego, conocidos, amigos y familiares en un alarde de generosidad por su parte intentan convencerme de que realmente no pasan los años por mí: "estás igual que hace 20 años macho !!!". Grassias colega, ... toy lo mismo que tú !
La realidad se impone cuando al comenzar cada día
veo mi careto reflejado en el espejo. Al acercarme, tras una ligera
inspección rutinaria descubro una arruga nueva, evidencio que debajo de
los ojos unas bolsas nada favorecedoras crecen día a día, y en lo que
una vez fué expléndida cabellera el pelo cambia hacia una obstinada
fijación por el color blanco y por si esto fuera poco su densidad por
centímetro cuadrado disminuye más rápidamente de lo que quisiera.
Parece
ser que el tamaño del agujero de ozono aumenta año tras año; puedo
afirmar que la escasez de pelo en mi coronilla se expande a mayor
velocidad.
Cuando se me ocurre echar un ojeada a
fotos de hace años se hace patente que el cambio físico que he
experimentado es más que presunto. A imágenes más antiguas mayor cambio
se aprecia. Listo que soy.
El
año pasado en mi 49 cumpleaños se me ocurrió celebrar el acontecimiento
con unas afotillos que seguramente abréis visto. En aquellas fechas ya
barruntaba festejar mi 50 aniversario con otra serie fotográfica.
No me costó mucho decidir el tema, solo
me quedaba darle forma a la idea, aunque necesitaba un aliado que
paradójicamente es un enemigo implacable: el tiempo. La cuestión es que
se me ocurrió algo que no es nada novedoso, pero que ha resultado
ciertamente divertido: durante un año me autoretrataría el día 10 de
cada mes. De esta manera quizás podría comprobar si 365 días de mi
existencia dejan huella física. (de la mental hablamos otro día capullín !!!)
El resultado lo veréis a partir del 1 de mayo. En
este pseudo-experimento mostraré unas instantáneas parecidas entre sí
porque aparte del motivo principal -el menda- están todas captadas en el
mismo lugar, con el mismo tipo de formato y de iluminación.
Puedes
ver en esta nueva entrada del blog varias imágenes. Te apunto que
aquella en la que aparezco con una foto enmarcada fue realizada el
pasado 10 de mayo del 2012: el autorretrato que sostengo fue tomado unos
15 años antes. Ya ha llovido (sic)
Si he cambiado mucho o poco ...ahora podemos comprobarlo.
Fondo musical:
Generación Límite.
Rock & Rios. Miguel Ríos
TUBECONTINUED...
Artículo del blog de nuestro compañero Rafa "Ahí te miro, Aquí te ves"